Esténcil clandestino

Si usted pasa por ahí, camine lentamente por la vereda, observe bien,  deténgase a mitad de cuadra y preste atención al aparente silencio.
Cierre los ojos, concéntrese, bajos sus pies sentirá el monótono latido latoso de un mimeógrafo. Si usted ya siente ese ritmo, le invito a descender sus latidos y podrá escuchar una subterránea locomotora de ideas que aún galopa.

En la noche, bajo las estrellas rojas podrá oler el solvente de las tintas que son prensadas por la Rota Print sobre el papel que espera ser leído entre compañerxs de luchas por venir.

Pero no desconecte su corazón, mire bien, en la vereda hay un árbol cuyas raíces han encontrado seguro hogar de memorias que esperan ser escuchadas.

De seguro usted querrá saber de qué se trata tamaña incógnita de la historia combatiente de nuestra ciudad. Usted tiene derecho a saber, ellxs, lxs que no están, también querrán que desde los sótanos se develen los susurros de lxs que ser abrazadxs esperan.

Para no romper el encanto clandestino, retírese en silencio, asegúrese de no ser seguido, no es necesario hacer contraseguimiento, vaya tranquilo, lxs compañerxs le acompañan. Si alguien le pregunta donde estuvo, diga que en el lugar donde se imprimió nuestra historia.

Por: @JoseComunicando

NOTA: Hace unas semanas se conoció un fallo favorable a la memoria de lucha del pueblo cordobés: la imprenta clandestina del PRT – ERP que funcionaba en barrio Observatorio en la década del 70, será reintegrada a sus verdaderos dueños.

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